Innovación contra la sequía

2023 terminaba con alerta de sequía en todo el país y con los embalses a un nivel muy bajo, con una media del 46% de su capacidad. Eso hace que el suministro de agua a las poblaciones esté en riesgo y la agricultura esté sufriendo pérdida. Las previsiones meteorológicas para los próximos meses no son además muy alentadoras y eso provocará la restricción del riego agrícola y el consumo doméstico.

Ahorrar agua se ha convertido, por tanto, en una necesidad urgente y por ello son bienvenidos todos los gadgets que contribuyan a ese ahorro. Uno de los últimos dispositivos que se han dado a conocer, llamado WaterUps, basa su solución en la condensación para conseguir convertir el vapor de agua del aire en agua líquida. Esto es posible gracias a que cuenta con un elemento calefactor que provoca la condensación del vapor en gotas de agua, para recogerlas en un depósito de 5 litros de capacidad. Esta solución, pequeña y portátil, puede convertir el aire seco en agua potable incluso en condiciones de sequía, lo que permite su uso en áreas remotas.

Otros desarrolladores enfocan su solución en la utilización de energías renovables en dispositivos creados para generar agua. Es el caso de Solar2Water, un dispositivo capaz de generar hasta 20 litros de agua potable al día a partir de la energía solar.

Si nos centramos en el riego y la sequía, el uso de sistemas de riego inteligentes ayuda a ahorrar agua tanto en la agricultura como en los hogares. Uno de los sistemas más extendidos es el riego por goteo, que suministra agua en forma de gotas a la zona radicular de las plantas. Y lo hace a través de una red de tuberías y goteros que se colocan a lo largo de la línea de plantación. Es un método muy eficiente, ya que el agua se aplica directamente a las raíces de las plantas, donde es más necesaria, lo que ayuda a reducir la evaporación del agua y el arrastre de nutrientes.

Existen también sistemas de riego automático que incorporan sensores de humedad del suelo: en estos, el ahorro se produce al evitar el desperdicio de agua, ya que los sensores identifican cuándo está seco el suelo para abrir las válvulas de riego y suministrar agua. Otros sistemas optimizan el gasto de agua a partir de sensores de lluvia: el sistema de riego automático incorpora estos sensores para cerrar las válvulas de riego cuando ha llovido, evitando el riego innecesario. Los riegos automáticos con sensores de humedad y temperatura del aire presentan un grado más de complejidad tecnológica, ya que son capaces de detectar cuándo es alta la humedad para reducir el riego. Y, si también la temperatura del aire es elevada, el sistema reduce el riego para evitar que se evapore.

Por último, existen también sistemas de riego automáticos basados en la energía solar. Estos incorporan paneles solares para generar electricidad, que se utiliza para alimentar los componentes del sistema de riego y ajustar el riego en función de las condiciones climáticas. Así, se evita el desperdicio de agua, regando sólo las plantas que más lo necesitan.

Todos estos sistemas de riego inteligentes son soluciones que se pueden instalar en el hogar para evitar el desperdicio de agua y ahorrar en consumo.

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