¿Cómo compraremos nuestros coches en el futuro?

Primero fue la venta por catálogo sin ver físicamente el producto. Después, con la aparición de internet, las primeras tiendas online como Amazon pusieron al alcance de un clic los primeros productos con envío a domicilio.

El rey de la última milla ha sido precisamente uno de los pioneros en romper la barrera de los envíos pesados. En 2017 se conocía la noticia del primer vehículo comprado a través de esta plataforma y enviado a un hogar español. Ese era el principio de algo que pretende convertirse en cotidiano. De un tiempo hasta ahora el comercio electrónico se ha convertido en algo imprescindible en la vida de las personas, y la industria automovilística no ha quedado al margen de ello.

Fabricantes tan importantes como Seat han sabido darse cuenta de que la venta en internet de vehículos cada vez cobra mayor importancia. Según sus cálculos, en 2016 más del 90% de los compradores de coches habían comenzado a buscar su modelo ideal a través de internet. Por ello, decidieron buscar al mejor aliado posible para aprovechar el potencial de la venta a través de la red. Gracias al trabajo conjunto de Amazon y la marca de origen español lanzaron una acción comercial nunca vista hasta el momento: la #DeliveryToEnjoy. Era posible realizar todo el proceso de compra de forma totalmente online a través de la web de Amazon: elegir la pintura, los acabados exteriores y el equipamiento extra. Todo ello con el atractivo de la rapidez de envío que caracteriza a la compañía americana: en 3 días se recibiría a domicilio el coche tras un depósito inicial de 500 euros.

Después de un par de años, los simuladores de configuración del vehículo permiten incluso ver in situ cómo sería el coche por dentro y por fuera según el diseño ideal que se busque. Tal nivel de detalle hizo que, por ejemplo, la marca Volvo reconociera que miles de sus clientes llegaban al concesionario con un presupuesto en firme y la decisión de comprar el coche casi tomada al 100%.

Hace unos años, para comprar un coche era imprescindible visitar varios concesionarios en búsqueda del modelo más adecuado e, incluso, visitar concesionarios de la misma marca para obtener el mejor precio posible. Ahora ya no es necesario siquiera tener el modelo de coche delante para saber si es el adecuado: el concesionario puede ofrecer desde vídeos de pruebas a visitas virtuales e incluso gafas de realidad virtual. Además de las propias marcas, existen plataformas como Carnovo, que permiten al usuario elegir coche online de la marca que mejor se ajuste a sus necesidades y gustos, algo que también permite el comparador de carfy.es. En 24 horas, su equipo encuentra y devuelve las mejores ofertas del mercado comparándolas en base a tres variables: precio, distancia a la que se encuentra el concesionario y la valoración de antiguos clientes según el trato recibido.

Iniciativas como las descritas explican que esta transformación haya hecho que los concesionarios busquen algo más allá de mostrar el vehículo a los potenciales clientes. Quieren transformar sus centros de venta en un lugar que, además de vender coches, también transmita experiencias y donde el visitante disfrute de las señas de identidad que caracterizan la marca.