¿Te imaginas circular por las carreteras con una mota voladora? Pues muy pronto será posible. Desde el 2017, gracias a la empresa rusa Hovesurf, las motos voladoras ya no son un paradigma propio de películas de ciencia ficción.
Si bien, hace años, la escena en la que Marty McFly huía en un monopatín volador en Regreso al futuro quedó impresa en nuestras retinas, en el presente podemos considerar que la tecnología ha hecho de las suyas para intentar hacer realidad esta mítica secuencia. El único cambio es que el monopatín ha sido sustituido por uno de los vehículos más míticos de la historia del automóvil: las motos.
Esta idea surgió como fruto de un capricho del cuerpo de Policía de Dubái, en Emiratos Árabes. Al parecer, el universo de George Lucas también llegó de pleno hasta el continente asiático y, por esta razón, han querido versionar un vehículo similar a los de El retorno del Jedi para sus labores de vigilancia y captura de criminales.
Para ello, el cuerpo de seguridad de una de las del lujo encargó a la empresa rusa Hovesruf una moto que pudiera planear. Fruto de esta idea, nacieron las “hoverbikes”. Desde el prototipo original se han introducido diversas mejoras hasta crear la moto voladora Hoversurf Scorpion 3. Este nuevo y último modelo pude soportar hasta 270 kilos, correr hasta 70 kilómetros por hora y tener un uso de hasta 25 minutos de carga de batería, al tratarse de un vehículo eléctrico.
Aunque en Europa los expertos dudan de su viabilidad debido a la cuantía de su mantenimiento, cuestiones de seguridad y, por lo tanto, protocolos de control, la moto voladora Hovesurf provee al usuario una mayor estabilidad en el aire que las anteriores versiones. Un punto en el que continúan trabajando para que este tipo de vehículo calé hasta poder modificar los protocolos actuales.
Si bien, la empresa ofrece a cualquier usuario la posibilidad de adquirirlo, este vehículo del futuro puede que no esté al alcance de todos dadas las condiciones y el precio. Quien desee comprar una de estas motos voladoras, necesitará desembolsar un depósito de unos 20.000 euros, posteriormente realizar un curso de pilotaje de unos 8.000 euros y, finalmente, ingresar el resto de la cuantía hasta llegar a los 130.000 euros.
Tras este despunte innovador, lo más curioso es que esta idea parece haber traspasado fronteras en la industria de las dos ruedas, puesto que el fabricante de sueños francés Lazareth ha creado una moto muy poco convencional que sigue la misma línea que la Scorpion 3, la Lazareth LMV 496.
Lo cierto es que la evolución tecnológica sigue trabajando en características en las que nunca habríamos pensado. Hace poco conocíamos la notica sobre como Kia Motors presentó su sistema de conducción adaptada a las emociones en tiempo real (R.E.A.D.) o cómo los coches y metros aéreos era una de las iniciativas propuestas para solucionar los atascos.