Apple, la compañía de hardware y software más conocida a nivel mundial, ha vuelto a hacer de las suyas. Hace unos años, los medios especializados ya pronosticaban que, en un futuro no muy lejano, el Face ID sería el sustituto de la huella digital. Esta idea se materializó en los nuevos iPhone X, pero ha continuado avanzando hasta tener repercusión en el mundo de la automoción.
Así es, aunque la compañía tecnológica recibió numerosas críticas fundamentadas sobre la seguridad de su tecnología del reconocimiento facial, Apple ha continuado en el proceso de desarrollo del Face ID para que el usuario pueda desbloquear su coche.
Esta tecnología ha sido patentada con el nombre de “Sistema y método de autorización de vehículos”, y está dirigida a aquellos usuarios que deseen prescindir de las llaves del coche. Para ello, solo tendrán que elegir cualquiera de las dos opciones que ya ha desarrollado Apple:
1. La primera opción consiste en instalar la tecnología requerida en el propio vehículo. Esta solución se basa en la colocación de unos sensores en el interior del coche que permiten reconocer la cara del propietario una vez que éste se sitúe delante de ellos.
2. La segunda opción está vinculada al propio Smartphone y consiste en utilizar la opción de desbloqueo Face ID del iPhone X y hardware propio desarrollado por el gigante norteamericano.
La razón principal de que se necesite este hardware se debe a que dispone de la cámara la TrueDepth, que está formada por un conjunto de cámaras, un proyector y un láser.
Además de abrir las puertas, el reconocimiento facial permitirá recordar las configuraciones específicas del vehículo para distintos usuarios, de tal forma que cualquier conductor habitual podrá acceder a una especie de “biblioteca” en la que figuren las caras de los ocupantes copropietarios del vehículo. Gracias a éstas, el vehículo podrá adaptar automáticamente la música, la posición del asiento o la temperatura del sistema de climatización.
La tecnología de Apple se suma a la tecnología disruptiva en el automovilismo ya que, aunque a priori, se hayan creado sistemas que ofrecían posibilidades similares, ninguna alcanzaba métodos tan avanzados. En este sentido, la carrera de fondo por liderar este ámbito tecnológico continua. Hace unos meses, Kia Motors lanzó su sistema de conducción adaptada a las emociones en tiempo real (R.E.A.D) o los distintos sistemas de seguridad vial tecnológicos con los que los vehículos estarán equipados obligatoriamente en 2019.