El mejor edificio del mundo en 2024 es una escuela en Sídney

200 edificios se han presentado al prestigioso concurso World Architecture Festival (WAF) 2024 para ser elegido el Mejor Edificio del Mundo. Y no ha sido ni un rascacielos, ni un hotel el premiado; ha sido una escuela pública de un barrio de Sídney, Australia, la que se ha alzado con el galardón. WAF explica que el diseño de su construcción, que combina el paisaje con los principios de sostenibilidad, ha sido determinante para conseguir el primer premio.

Cada año se levantan, según datos de organizaciones como Naciones Unidas y la Asociación Global de Construcción, millones de edificios residenciales y comerciales, especialmente en países con alta urbanización como China, India, y Estados Unidos. Y, en los últimos años, el crecimiento en la construcción de edificios sostenibles y eficientes energéticamente ha aumentado, especialmente en países que promueven la reducción de emisiones. A este último grupo pertenece el Darlington Public School de fjcstudio, ganador del Edificio Mundial del Año 2024 de WAF: una escuela primaria ubicada en la comunidad de Chippendale, al sur de la zona comercial de Sídney y construida en los años 70, por lo que sus instalaciones se encontraban deterioradas.

World Architecture Festival es el único programa de premios de arquitectura en el que todos los finalistas presentan sus proyectos en vivo ante un panel de jueces y una audiencia de pares. Esta experiencia distintiva de evaluación entre pares permite a los participantes y asistentes explorar e intercambiar las innovaciones arquitectónicas más revolucionarias de todo el mundo. Y en esa presentación quedó patente que la escuela primaria pública Darlington, cuya construcción concluyó el 7 de julio de 2023, ofrecía una sensación de privacidad y comunidad para los niños, respetando la rica cultura indígena y el patrimonio artístico que poseía la escuela anterior. Una escuela de los años 70 que había sido una escuela de Demostración (lugar donde se prueban nuevas metodologías pedagógicas, materiales didácticos y enfoques de enseñanza antes de aplicarlos a nivel más amplio en otras instituciones), por lo que era importante que su espíritu se mantuviera y que proporcionara un entorno de aprendizaje inclusivo en esta nueva etapa.

La arquitecta responsable del proyecto, Elisabeth Carpenter, priorizó en el diseño un enfoque colaborativo, crucial para integrar la forma construida y el paisaje, resolver los grandes desniveles del terreno y lograr una verdadera conexión con el paisaje y el campo, adoptando la sostenibilidad con elementos de diseño pasivos como techos en forma de dientes de sierra en ángulo hacia el sol, acristalamientos de alto nivel para la luz natural indirecta y pantallas curvas protectoras para la luz natural filtrada. Tuvo muy en cuenta también que los accesos públicos se ubicaran de manera que se convirtieran en una parte integrada del paisaje urbano circundante. La pantalla que protege las terrazas de aprendizaje al aire libre es segura y proporciona una hermosa luz moteada que recuerda a la luz que pasa a través de las hojas de la casuarina (especie de pino australiano), endémica de la zona de Blackwattle Creek. Y la selección de materiales se centró en la rentabilidad, la durabilidad y la minimización de los gastos operativos.

La construcción de la escuela se realizó en dos etapas, lo que permitió el funcionamiento continuo de la escuela y eliminó los costos de reubicación. Se apostó por dos niveles superiores con diversos espacios, que incluyeran áreas húmedas, espacios de presentación, salas tranquilas, zonas de aprendizaje informal, centros de maestros y terrazas de aprendizaje al aire libre conectadas. Y la zona de preescolar se separó para lograr un entorno de aprendizaje seguro para los más pequeños.

Los jueces lo han tenido claro: “El proyecto ganador exploró y amplió el programa oficial del cliente para incluir las opiniones y la experiencia de la comunidad local y una variedad de usuarios. Esto generó una lectura de la historia del lugar, la cultura y el tiempo. Y el resultado ha sido un edificio en el que la topografía y el paisaje, el interior y el exterior, la forma y los materiales, fluyen a la perfección de una manera inesperadamente encantadora”.

© Imágenes: Shutterstock.

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