Bajo el nombre comercial Neo QLED, el fabricante surcoreano ofrece sus Smart TV de 2021 con LEDs cuarenta veces más pequeños que los que equipaban los modelos de la anterior generación con “local dimming”. OLED, QNED, Micro LED, Mini LED o el mismo Neo QLED son algunos de los nombres con los que se conocen las nuevas tecnologías de pantalla que llegan con fuerza para ofrecer una calidad de imagen superior.

Esto abre a los consumidores un amplio panorama de opciones a la hora de elegir un televisor de gama alta, si no se conocen bien las diferencias, se puede complicar la compra. Marcas como Sony, Panasonic, LG o Phillips compiten con sus avanzados paneles LCD y Samsung, por su parte, entra en esta dura pugna comercial con cinco modelos. Dos de ellos, el QN900A y el QN800A, incorporan un panel LCD VA con resolución 8K. Los otros tres, el QN95A, QN90A y QN85A, optan por una solución 4K UHD.

Muchas de estas novedades se pudieron ver en la última edición del Consumer Electronics Show (CES), celebrada de manera virtual el pasado mes de enero.

Todos los televisores Neo QLED de Samsung utilizan la retroiluminación Mini LED de tipo FALD (Full Array Local Dimming), que emite la luz desde el interior del panel a la propia pantalla de un modo más eficaz que en otros sistemas de retroiluminación como Edge LED o Direct LED. Al reducirse el tamaño de los LEDs y, por consiguiente, tener la posibilidad de poner más y colocarlos más juntos, se logra una distribución de la luz más homogénea por toda la pantalla. Además, el control de esos diodos de manera independiente en miles de zonas de iluminación y un nuevo sistema de encapsulado que reduce la dispersión de la luz, hace que se reduzca el “blooming” y se obtenga una imagen más realista tanto en color como en luminosidad. Se mejora el contraste, se obtienen negros más puros, brillos más intensos y sombras mejor definidas.

Pero éstas no son las únicas novedades de los nuevos televisores de Samsung. Estrenan también motor de procesado, un diseño más estilizado, prestaciones acústicas mejoradas, HDMI 2.1 y los modelos 8K incorporan WIFI 6. La pega en cuanto a conectividad la encontramos en los modelos 4K, que solo disponen de un puerto HDMI 2.1.

La potencia del procesador es uno de los aspectos que más podrían comprometer el rendimiento de un televisor con esa cantidad de información. A este respecto, los responsables de la marca aseguran que los Neo QLED incorporan nuevos algoritmos de gestión de la retroiluminación y un procesador con músculo más que suficiente.

En cuanto a las partes visibles, se rediseña el módulo One Connect para hacerlo más estilizado y el mando a distancia, que contiene un 28% de polietileno reciclado e incorpora un pequeño panel fotovoltaico para recargar la batería con luz solar o artificial. Gracias a la tecnología Mini LED, el grosor de la pantalla es bastante menor que en los modelos anteriores. La peana central está fabricada en metal y garantiza una buena estabilidad del televisor.

Es el próximo gran lanzamiento anunciado por Nintendo. Y no solo es un juego, sino la respuesta a muchos usuarios que, además de jugar, quieren aprender a crear sus propios videojuegos. Bajo el nombre de Game Builder Garage, se espera su comercialización en EE. UU. a partir del 11 de junio a un precio de 29,99 dólares. Todavía estamos pendientes de conocer la fecha de lanzamiento en Europa y su precio en euros.

Como decimos, la gran novedad de este software es que permite diseñar y compartir videojuegos. En definitiva, algo parecido a Roblox y diseñado, según declaraciones de la compañía, “para aprender lo básico de diseño de videojuegos y programación visual”. Para ello, la herramienta cuenta con una serie de lecciones, asequibles a cualquier edad, que muestran cómo crear hasta siete tipos de videojuego diferentes paso a paso con los mandos y la pantalla táctil de la Nintendo Switch, aunque también permitirá la conexión de un ratón compatible.

El hecho de que los más pequeños puedan llegar a comprender y aplicar procesos sencillos de programación, eso sí, apoyándose en una interfaz muy alegre e intuitiva, va en línea de lo que el sector educativo lleva años considerando como el idioma del futuro: el “coding”. Desarrollar estas habilidades no solo les faculta para crear videojuegos a su gusto, sino que también les entrena en un pensamiento lógico con el que podrán resolver multitud de problemas. Ese es también el objetivo de Minecraft: Education Edition, la adaptación del popular videojuego de construcción Minecraft con la que Microsoft busca enseñar a los niños a programar jugando.

El sistema utilizado por Nintendo para crear videojuegos con el Game Builder Garage se basa en la conexión de nodos. De hecho, las pantallas muestran a unas criaturas llamadas Nodon a las que se le asignan una serie de órdenes mediante esas conexiones. Se trata de una tecnología similar a la usada en programas de animación mucho más complejos, que también se sirven de nodos conectados, por ejemplo, a materiales para asignar texturas, índices de refracción, inercias, etc. En el caso de la Nintendo Switch y su Game Builder Garage, el jugador cuenta con una “Nodopedia” que explica todas las funciones disponibles, es decir, las órdenes que puedes aplicar y combinar: avanzar, presionar botones, activar efectos sonoros, etc.

En cualquier momento, la herramienta permite cambiar de “modo programación” a “modo juego” para comprobar en tiempo real el funcionamiento de tu creación. También existe un modo llamado “Free Programming”, que desbloquea todas las funcionalidades para que se pueda crear cualquier videojuego que puedas imaginar. Una vez das por finalizada tu creación, la puedes compartir con tus amigos o con todo el mundo a través de códigos.

Game Builder Garage está especialmente desarrollado para Nintendo Switch, una consola innovadora y diferente a todas las demás, con la que Nintendo está logrando recuperar el lugar destacado que le corresponde en el sector del videojuego tras el fracaso de la Wii U.