Romper la última milla en la entrega con vehículos autónomos

Las exigencias de los consumidores son cada vez mayores. Los usuarios de compra online no solo buscan la comodidad a la hora de gestionar sus compras, sino también la facilidad y la rapidez en la recepción de los productos. Esto ha dado lugar a una de las mayores “guerras” de las compañías dedicadas al ecommerce, e incluso a las que no se dedican a ello. La última en realizar un desarrollo en el ámbito de la denominada “última milla” es Continental.

Amazon sorprendió a todos hace apenas un año con el lanzamiento de Amazon Key, una solución a través de la cual el gigante estadounidense generaba su propia cerradura y “rompía” ya con toda barrera existente entre el domicilio de sus compradores y Amazon. Aunque su versión sigue probándose en modo beta en algunas ciudades americanas.

Por si fuera poco, después de abrir la puerta, Amazon decidió desarrollar su propio microondas y Alexa, su dispositivo para gestionar una smarthome, con lo que, no solo abre la puerta, sino que se mete de lleno en los hogares para conocer más sobre nuestros gustos, horarios y cualquier preferencia general sobre cómo nos gusta gestionar nuestro día a día.

Aunque pueda parece que el gigante norteamericano lleva una ventaja clara sobre sus competidores, uno nuevo ha salido a la palestra. Continental ha desarrollo dentro de su proyecto Experiencia de Movilidad Urbana (CUbe por sus siglas en inglés), una plataforma de vehículos eléctricos preparados para realizar repartos sin necesidad de conductor.

¿Cómo realiza estos repartos a domicilio? Cada vehículo lleva en su interior pequeños robots de entrega que la compañía ha imaginado en forma de perro. Esta solución se considera como una opción de “primera y última milla”, ya que cubre la llegada del vehículo sin conductor a la ciudad o la zona residencial donde realizar entregas y, una vez allí, desembarca los pequeños robots que se encargan de llevar la mercancía hasta la puerta de casa de los clientes.

Tanto el vehículo como los pequeños robots son autónomos y, en principio, “ambos pueden basarse en las mismas tecnologías escalables, por lo que estas sinergias tienen gran potencial para el desarrollo de conceptos holísticos de entregas”, según explicó el director de Sistemas y tecnología de Continental durante la presentación de la solución el pasado mes de enero en el CES 2019.

Según Continental, se espera que la entrega automatizada dará respuesta el 80% de todas las entregas entre empresas y consumidores y, con este proyecto se espera poder cubrir los picos de demanda de vehículos sin conductor durante el día, por lo que el uso de pequeños robots para entregar mercancías puede hacerse en las horas de menor demanda de coches autónomos, de tal forma que se puede seguir obteniendo rendimiento de ellos.