Diferentes grupos de investigadores están probando soluciones para refrigerar viviendas y automóviles a través de unas pinturas especiales.
En el escenario de la crisis climática en el que vivimos, donde las temperaturas alcanzan récords históricos, el confort tiene un precio. Y no hablamos solo del impacto económico en las familias: el impacto medioambiental es alarmante, ya que a medida que millones de personas encienden sus aires acondicionados, también se incrementa la huella de carbono. Así, mientras enfriamos nuestras casas calentamos el planeta y vaciamos nuestros bolsillos. Las ciudades ya se están concienciando y aplicando soluciones para afrontar el calor extremo, pero, en el interior de nuestras viviendas, resulta muy difícil renunciar al aire acondicionado cuando los termómetros marcan 40ºC.
Ante esto, la pregunta que surge es crucial: ¿es posible enfriar una vivienda sin recurrir al aire acondicionado? Y la respuesta podría estar en algo tan cotidiano como la pintura.
Científicos de la American Chemical Society (ACS) han propuesto una solución que, en lugar de depender de un electrodoméstico, sea tan sencilla como una película de pintura. Una alternativa basada en la refrigeración radiativa pasiva (CRDP, por sus siglas en inglés). Esta tecnología permite que las superficies emitan su propio calor hacia el espacio sin calentarse a través del aire circundante y que, como resultado, se consigue un enfriamiento de hasta 4 grados respecto al entorno, sin gastar un solo vatio de electricidad.
Este avance no solo tiene el potencial de revolucionar la climatización de edificios, sino que podría aplicarse también a automóviles y otras infraestructuras. La clave está en los nanocristales de celulosa (CNC), extraídos de plantas, que permiten que la pintura adquiera propiedades iridiscentes y coloridas sin necesidad de pigmentos tóxicos. Las pruebas han demostrado que un metro cuadrado de esta película puede generar más de 120 vatios de potencia de refrigeración, equiparable al rendimiento de algunos aires acondicionados convencionales.
Un metro cuadrado de esta película puede generar más de 120 vatios de potencia de refrigeración, equiparable al rendimiento de algunos aires acondicionados convencionales.
Pero, la innovación en este campo no se detiene aquí. Otro grupo de investigadores chinos han desarrollado una pintura que, al igual que el camaleón africano Namaqua, cambia de color (claro para reflejar el calor durante el día y un tono oscuro para absorberlo durante la noche) la pintura propuesta por el equipo del profesor Fuqiang Wang imita esta habilidad, optimizando el enfriamiento y la calefacción pasiva de edificios.
Las pruebas iniciales muestran que, en verano, esta pintura puede reflejar hasta el 93% de la radiación solar, manteniendo frescas las estructuras en comparación con otras soluciones tradicionales como el acero o las baldosas blancas. En otoño y primavera, las fluctuaciones de temperatura se compensan eficazmente con el cambio de color, creando un ambiente confortable sin necesidad de sistemas de refrigeración o calefacción adicionales.
Y si nos fijamos en el sector del automóvil, vemos que tampoco se queda atrás. La empresa japonesa Nissan ha desarrollado una pintura capaz de reducir hasta 12 grados la temperatura exterior de un vehículo y 5 grados en su interior. Esta innovación no solo mejorará el confort de los pasajeros, sino que también promete una disminución considerable en el uso del aire acondicionado, lo que, en el caso de los coches eléctricos, se traducirá en un aumento significativo de la autonomía.
Los avances en estos recubrimientos no solo se limitan a la reducción de la temperatura. Algunos materiales derivados de la celulosa podrían ser utilizados como sensores para detectar contaminación atmosférica, integrando soluciones multifuncionales en los edificios del futuro. Y todo ello podría ser clave para reducir nuestra dependencia energética y, al mismo tiempo, ofrecer una alternativa más sostenible. Y quizá también pueda ser el principio del fin del aire acondicionado, tal y como lo conocemos.
© Imágenes: Shutterstock.
Mutua Madrileña no se hace responsable del producto objeto de la presente entrada ni de las consecuencias de cualquier acción realizada en base a la información proporcionada. Esta información, obtenida de fuentes públicas, no supone, en absoluto, una recomendación de compra ni garantiza la calidad, disponibilidad y/o accesibilidad de los productos indicados.
Blog ÓN
Comité de contenidos