Cultura, proyectos y start ups son las tres palancas sobre las que trabaja Mutua Ventures, el área de innovación y Corporate Venture Capital de Mutua Madrileña. Este equipo es el responsable de la aceleración de ideas innovadoras y la inversión en start ups con el objetivo de que ayuden a la compañía a evolucionar sus productos, servicios y formas de gestión. En esta entrevista, charlamos con el equipo de Mutua Ventures, para conocer más sobre la importancia que tiene la innovación abierta en el Grupo Mutua y los proyectos que se están desarrollando, tanto dentro de la compañía como fuera de ella.
El pasado mes de junio se lanzó Mutua Ventures, un nuevo vehículo corporativo para invertir en start ups que promuevan el crecimiento y diversificación de su negocio. ¿Cuál es su objetivo y qué factores se van a tener en cuenta en la elección de las empresas?
Mutua Madrileña lleva años invirtiendo en compañías de base tecnológica: esto nos ha aportado aprendizaje y nos ha convencido del potencial de invertir en soluciones innovadoras. Es por esto por lo que Mutua Ventures nace con el objetivo de invertir directamente en compañías de base tecnológica, aplicando 3 criterios en la selección de las oportunidades invertibles: oportunidades en fase inicial pero con un modelo de negocio testado, con alto riesgo pero también potencial de crecimiento y con encaje estratégico con nuestros 4 verticales prioritarias (ahorro, salud, hogar y movilidad) además de con la tradicional rama aseguradora de la compañía.
Además de la financiación, ¿qué valor diferencial aporta a una start up el hecho de estar impulsada por Mutua?
Mutua Ventures surge con el objetivo de aprovechar los nuevos enfoques de negocio que proponen numerosas start ups, altamente dinámicas e innovadoras, y que pueden ayudar a la compañía a mejorar o desarrollar sus productos, sus servicios o la forma de gestionarlos. Esto implica una relación beneficiosa para ambas partes, ya que estas capacidades se multiplican sobre la base de la experiencia de negocio que tenemos en Mutua y la base de clientes a los que poder dirigir la oferta.
Actualmente estamos trabajando en un marco de inversión que implique no solo la participación de Mutua Madrileña en el capital como un socio estratégico que ayude a hacer crecer el negocio, sino también en la construcción de casos de uso sólidos que justifiquen la posterior inversión. Creemos que esto es algo diferencial en el sector ya que hay pocos CVC que incorporen financiación y negocio en las oportunidades.
Mutua dispone de un lab de innovación en el que se construyen y testean nuevas soluciones que generen impacto en la compañía. ¿Qué proyectos se han desarrollado en este sentido?
Este laboratorio tiene su origen en el programa de intraemprendimiento, en el que se desarrollan proyectos que son estratégicos para la compañía y que, por este motivo, necesitamos que se desarrollen con la ayuda del conocimiento interno. A través de este Programa, cubrimos un espacio muy amplio, ya que hemos desarrollado proyectos como bots de atención al cliente, modelos de inteligencia artificial para reducir el fraude y mejorar la cotización, o proyectos tan importantes para nosotros como puede ser el sistema por el que nuestros clientes se relacionan con los talleres de la red de Mutua.
Con Mutua Ventures, nuestro Programa de Intraemprendimiento también ha evolucionado, ya que asumimos el compromiso de implantación de los 3 proyectos ganadores, y alineamos las oportunidades de inversión con la puesta en marcha de estas oportunidades y el interés de la compañía.
La innovación hoy en día es clave para desarrollar proyectos diferenciadores que aporten valor a las personas. ¿Cómo definiríais el término “innovación” y qué debe tener un proyecto para serlo?
Hay muchas definiciones para el término Innovación. Aquí no buscamos tanto ser rigurosos desde el punto de vista académico, sino conseguir asociar el término de innovación en Mutua a 3 conceptos: cultura, proyectos y start ups.
Es importante construir una cultura de Innovación que sirva para que las áreas de negocio y soporte sean capaces de resolver problemas, replantear procesos y gestionar el cambio de forma ágil y eficiente. Sobre los proyectos que desarrollamos, buscamos generar impacto en beneficios, bien a través de la construcción de nuevos productos o servicios o bien mediante la reducción de costes con mejoras operativas.
Las start ups son clave por las capacidades que han desarrollado, por su versatilidad y complementariedad con nuestro negocio. Pero es importante construir una buena relación, basada en el crecimiento del negocio y la satisfacción de todos los participantes en la relación, desde los clientes hasta los directivos de ambas partes.
Generalmente, cuando una propuesta es innovadora, suele provocar rechazo en un primer momento. ¿Cómo desarrolláis vuestras iniciativas para convencer a los responsables de las ventajas del cambio?
Es cierto, como en cualquier iniciativa innovadora, en ocasiones los proyectos que hemos intentado impulsar no han salido adelante. Esto nos ha servido para trabajar en dos herramientas: un comité de directivos acostumbrados a proyectos con un alto nivel de incertidumbre y conocimiento suficiente de negocio que facilitan decisiones rápidas, necesarias en estos proyectos. La segunda herramienta son los pilotos, proyectos de bajo impacto que sirven para validar hipótesis y, en definitiva, para demostrar la viabilidad y obtener conocimiento sobre el impacto de los proyectos, target de cliente, producto, conversión o riesgos de la puesta en marcha.
Con esas dos herramientas, decisión e información contrastada, conseguimos que los proyectos se validen con un nivel de incertidumbre más acotado y, por tanto, la resistencia de la organización a los nuevos planteamientos es menor.
Sol de León
Comunicación & Social Media