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14 DE ENERO |

¿Cómo será la leche del futuro?

¿Cómo será la leche del futuro? Calidad Pascual ha analizado cómo serán los procesos de producción y distribución de este lácteo gracias a las nuevas tecnologías.

Que la tecnología y la innovación impacta en todos los ámbitos de nuestra vida no es ninguna sorpresa, pero llegar a pensar que incluso un producto tan básico como la leche pueda llegar a personalizarse en pocos años, no deja de resultar una afirmación más propia de la ciencia ficción. Desde Calidad Pascual, indican que en pocos años se podrán elegir los nutrientes necesarios para la rutina diaria del consumidor e incorporarlos a la leche. Algo que se conseguirá tras el diseño de micronutrientes destinados a la alimentación de las vacas productoras.

Desde hace años, el consumo de la leche se ha naturalizado y se ha prolongado pasada la etapa de lactancia de los bebés, dado que tanto este lácteo como sus derivados, considerados saludables en Occidente, son considerados alimentos completos que poseen principios inmediatos como las proteínas, lo lípidos y los glúcidos, además de ser ricos en vitaminas del grupo B, A y D o minerales como el calcio.

¿Cómo serán las granjas de leche en el futuro?- ÓN

De alguna forma, la tecnología ha fomentado el incremento la toma de este alimento al incrementar su conservación durante más días, y evitar que fuese un vehículo transmisor de enfermedades o generase problemas digestivos.

Aunque existen todavía algunas líneas detractoras del consumo de este alimento y se trabajan en alternativas para los intolerantes, lo cierto es que  la toma de la leche continúa siendo un hábito generalizado y se pronostica que, en el año 2070, gracias al uso de las nuevas tecnologías en el ámbito de la alimentación, puedan variar el modo de convivir y alimentarnos con él, preservando así su existencia.

La estrategia reside en situar la ganadería en los tejados de la fábrica de Pascual a modo de floting farms.

Lo cierto es que se pronostica que dentro de 50 años la figura del ganadero sea tal cual como lo conocemos, independientemente de los actuales problemas medioambientales, la despoblación del medio rural, el escaso relevo generacional o la puesta en marcha de las nuevas tecnologías, sea un rol extinto y que las granjas pertenezcan al futuro, “donde el software y la robótica serán las protagonistas, mejorarán la productividad de la ganadería y harán la vida más fácil al productor”, tal y como afirma Joaquín Lorenzo, director de Compras Agro de Calidad Pascual.

Bajo esta afirmación se refuerza la idea de que las vacas no desparecerán, dado que la estrategia reside en situar la ganadería en los tejados de la fábrica de Pascual a modo de floting farms, en Aranda del Duero, para lograr un producto local “recién ordeñado y puesto en la nevera del consumidor en cuestión de horas”, según indica Rodrigo Zanetti, Jefe de Producción del Complejo Industrial de Aranda del Duero de Calidad Pascual.

Además, las vacas utilizadas para este propósito no solo producirán leche para la industria, sino también datos, así lo afirma la directora de I + D de Calidad Pascual, Sofía Pérez tras “aplicar nuevas tecnologías de medición, recopilación y análisis de datos para el estudio y la predicción de procesos” para su mejora.

La conclusión de este estudio es que la leche del futuro podrá ser un producto avanzado a la genética del usuario gracias la personalización de éste, puesto que se podrán elegir los nutrientes necesarios para la rutina diaria del consumidor. Todo ello logrado a priori, tras el diseño de micronutrientes destinados a la alimentación de las vacas productoras.

Además de la evolución de la producción, también se producirá un cambio en el formato de distribución. Dentro de 50 años, los recipientes utilizados serán originarios del reciclaje de las heces de la vaca. Según imagina M. Cruz Córdoba, responsable de desarrollo e ingeniería de materiales E+E de Calidad Pascual, “con la síntesis de un componente de las heces podemos generar polvos de un material que, mediante calentamiento, fundición y compresión en un molde, dé lugar a un envase reciclable”.

Patricia Moya

Patricia Moya Manzano

Técnico de Comunicación