Dispositivos del día a día para el cuidado de tu salud

Apple ha dado un paso más en la investigación de la salud, anunciando el lanzamiento de Apple Health Study, una investigación con la que buscan descubrir de qué manera los dispositivos que usamos a diario -como el iPhone, los AirPods y el Apple Watch- podrían anticipar y detectar cambios tanto en la salud física como en la mental.

Este estudio, desarrollado en colaboración con el Brigham and Women’s Hospital, se centra en analizar la relación entre diversas métricas de salud y los dispositivos tecnológicos que usamos cada día. Entre otros aspectos, examinará cómo la salud mental puede influir en la frecuencia cardiaca o la manera en que los patrones de sueño podrían afectar los hábitos de ejercicio.

La iniciativa parte de investigaciones previas de Apple, que han sumado más de 350.000 participantes y se han enfocado en temas como la salud de la mujer, la audición y la función cardíaca. Con esta nueva investigación, la compañía adopta un enfoque más amplio al abarcar simultáneamente la salud cardiovascular, la cognición, la salud mental y la movilidad.

Esta gran base de usuarios de Apple y los sensores integrados en sus dispositivos ofrecen la posibilidad de reunir datos a una escala inédita; nada comparado con los estudios médicos tradicionales que suelen estar limitados por la cantidad de participantes y la forma de recopilar información. No obstante, el proyecto contempla tanto la tecnología de Apple como la de terceros, lo que sugiere una estrategia de monitoreo de la salud más extensa e inclusiva.

En cuanto a la privacidad, es un factor prioritario en el estudio. La participación es voluntaria, y los usuarios pueden elegir qué datos desean compartir o retirarse del estudio en cualquier momento. Apple hace hincapié en que no accede a la información de identificación personal que se proporciona a través de la app Research.

La investigación podría transformar la manera en que se gestiona la salud en el futuro. La detección temprana de cambios, por ejemplo, en la audición -que podría indicar problemas cognitivos-, permitiría intervenciones más eficaces. No obstante, el desafío principal radica en convertir la ingente cantidad de datos recopilados en información de valor que se traduzca en mejoras tangibles para la salud de las personas.

El Apple Watch y la monitorización de la salud

Uno de los protagonistas de este estudio ha sido el Apple Watch. Sus funciones incluyen la medición de la frecuencia cardiaca, la detección de ritmos irregulares y la notificación en caso de niveles anormales de oxígeno en sangre. Además, este reloj inteligente incorpora un sistema de detección de caídas y avisos automáticos a servicios de emergencia, algo que ha sido especialmente útil para personas mayores y aquellos con problemas de movilidad.

El estudio destaca que los usuarios que utilizan regularmente estas funciones tienen una mayor conciencia sobre su salud cardiovascular y pueden detectar a tiempo posibles problemas. Sin embargo, también se señala que, aunque estas herramientas son útiles, no deben reemplazar la consulta con un profesional de la salud.

El iPhone y el bienestar digital

El iPhone también ha sido objeto de análisis en este estudio, especialmente en lo que respecta a sus funciones de bienestar digital. Apple ha incorporado herramientas como el control del tiempo de pantalla y los modos de concentración para ayudar a los usuarios a gestionar su uso del dispositivo. Además, la aplicación Salud permite llevar un registro de actividad física, calidad del sueño y niveles de estrés, recopilando datos a partir de diversas aplicaciones y dispositivos compatibles.

Uno de los hallazgos más destacados del estudio es que aquellos usuarios que utilizan estas funciones de gestión del tiempo de pantalla tienden a reducir el uso excesivo del móvil y a mejorar sus hábitos de sueño. No obstante, también se señala que el constante acceso a notificaciones y redes sociales puede generar ansiedad si no se regula adecuadamente.

Los AirPods y la salud auditiva

Otro aspecto interesante del estudio se centra en los AirPods y su impacto en la salud auditiva. Con el incremento del uso de auriculares inalámbricos, Apple ha implementado funciones para medir los niveles de exposición al ruido y alertar a los usuarios cuando el volumen es demasiado alto.

El informe destaca que esta función ha sido clave para prevenir problemas auditivos a largo plazo, ya que muchos usuarios no son conscientes de la cantidad de decibelios a la que están expuestos a diario. Sin embargo, también se menciona que el uso prolongado de auriculares, independientemente del volumen, puede generar fatiga auditiva y afectar la salud del oído.

© Imágenes: Shutterstock.

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