La lista de excesos navideños es larga: turrones, polvorones, cava, marisco, etc. Todas estas comidas típicas de la Navidad hacen ganar unos cuantos kilos de más al cuerpo que, una vez finalizadas estas celebraciones, se hacen difíciles de eliminar. Tras tanto exceso, incluso llega a apetecer recuperar la dieta equilibrada tras las vacaciones de verano.
Una vez pasado el día de Reyes, es habitual encontrar los gimnasios repletos de personas tratando de perder esos kilos extra ganados durante la Navidad. Aunque existen diversas tecnologías en la alimentación que ayudan a la salud, también existen maneras de añadir fácilmente verduras a la dieta para comer más sano. Sin embargo, éstos son algunos de los métodos que ayudarán a recuperar más rápidamente la forma física.
1. Evitar sustancias que no depuren el cuerpo. Se acabó el consumo de alcohol, cafeína y refrescos no saludables. Tomar en ayunas un vaso de agua caliente con limón contribuye a alcalinizar el cuerpo y facilita perder peso.
2. Volver a la rutina alimentaria previa a las fiestas navideñas. Una dieta sana debe incluir cinco comidas diarias que se rijan por unos horarios estrictos. Gracias a ello, se activará el metabolismo y se conseguirán dos objetivos: tener menos hambre y evitar picar entre horas. De hecho, para los menos aficionados a cocinar existen alternativas como Foodtopía, que ofrecen comida sana y barata.
3. Beber agua es esencial. Sin una adecuada hidratación, el organismo será incapaz de eliminar todas las toxinas acumuladas en el cuerpo. Además, beber menos de litro y medio de agua al día puede ocasionar dolores de cabeza, disminución de la memoria y fatiga. E, incluso, para los menos aficionados al agua, las infusiones también pueden ser una buena solución. Algunas infusiones como el té verde pueden ser muy útiles para quemar lípidos y reducir la retención de líquidos.
4. Dormir más es sinónimo de salud. El ciclo de sueño, sin duda, queda trastocado durante las fiestas navideñas. Ya sean meriendas que se alargan y se convierten en cenas, o cenas de nochevieja que se extienden hasta altas horas de la madrugada, el ritmo de sueño del cuerpo acaba resintiéndose y, con ello, la salud general (ya que las personas que duermen poco tienden a comer más). Por ello, es importante retomar la rutina de 6 a 8 horas de sueño continuado diario.
5. Hacer ejercicio es imprescindible. Como mínimo dos veces a la semana para ir incorporando el deporte en la rutina diaria. Puede ser caminar o subir y bajar escaleras. Además, gracias al gimnasio virtual Wowego se habrán acabado las excusas: ya que quemar calorías es esencial para mantener la forma.