La saliva continene más de 5.000 proteínas identificadas y es, después de la sangre, el fluido corporal más importante para el diagnóstico no invasivo de diferentes estados de salud. Ahora, es posible realizar la prueba de embarazo con un sencillo análisis de estos fluidos.
Recientemente ha salido a la venta un test que se ha diseñado para detectar la hormona del embarazo beta-hCG: se trata de una hormona específica del embarazo que ayuda a preparar el útero para el desarrollo del embrión. Si en el autodiagnóstico se detecta esta hormona, el test cambia de color y muestra el resultado como positivo.
Cada vez hay más avances que ayudan a que la experiencia de un embarazo sea más segura y satisfactoria. En el caso de las pruebas de embarazo, anualmente se venden alrededor de 840 millones kit de test, pero todas ellas, unas 50 marcas, son de orina.
Pero ¿qué prefieren las mujeres embarazadas? Antes de desarrollar uno de estos tests basados en saliva, los investigadores encuestaron a 300 mujeres embarazadas y no embarazadas sobre sus preferencias entre una prueba de embarazo de orina o de saliva. En este estudio, el 68% de las mujeres se decantaron por el test de saliva, frente al 21% que afirmaron preferir un test de orina. Para el 11% restante, el tipo de prueba era indiferente.
La utilización de saliva en aplicaciones de PDR (pruebas de diagnóstico rápido) creará la próxima generación de diagnósticos rápidos. Este tipo de tests permiten reducir los costos, aumentar la accesibilidad a pruebas no invasivas e indoloras y aumentar la seguridad.
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