La clave es, antes de emprender el viaje, saber cómo colocarlas correctamente para que no se dañen.
El temporal de frío polar y nieve, bautizado como Fien, ya está haciendo de las suyas en nuestras carreteras, un buen momento para recordar cómo debemos colocar las cadenas del coche en caso de tener que recurrir a ellas estos días y recordar cómo debemos extremar la precaución al volante en condiciones adversas. Eso sí, antes de coger el coche, asegúrate no solo de llevar las cadenas, sino también de comprobar el estado del vehículo, llevar un teléfono móvil con su cargador y ropa de abrigo.
El montaje dependerá del tipo de cadena que tengamos, ya que existen diferentes tipos. Las cadenas metálicas son duraderas y eficaces, aunque ruidosas. Su montaje en condiciones de frío y humedad puede ser difícil. Son las más duraderas y las más utilizadas. Otro tipo son las cadenas semiautomáticas, que son las más costosas pero muy eficientes. Se puede circular todo el invierno con el soporte instalado en la llanta y, de ser necesario, las cadenas se acoplan con rapidez. Por último, el tercer tipo de cadenas son las fundas textiles que, además de ser muy fáciles de montar, ocupan poco espacio y son muy eficientes. Son la mejor opción para quienes viven en zonas con abundante lluvia y temperaturas por debajo de los 10º centígrados porque se agarran mejor y frenan antes, pero son más caras que las cadenas convencionales.
La clave con las cadenas es colocarlas correctamente para que no se dañen. En el momento de instalarlas, hay que tener en cuenta dónde están las ruedas motrices del coche ya que, en condiciones de poca adherencia, todos los tipos de cadenas se montan siempre sobre las ruedas motrices, las que reciben la fuerza del motor.
De esta forma, en los vehículos de tracción, las cadenas deben ponerse en las ruedas del eje delantero, pues son las que reciben la fuerza (par) del motor. Por el contrario, en los vehículos de propulsión, las ruedas motrices están en el eje trasero y es en ellas donde deben ponerse las cadenas cuando no tenemos adherencia.
¿Y si es un vehículo 4x4? En este caso, y como existen distintos tipos de transmisiones integrales, es necesario atenerse a las recomendaciones de cada fabricante respecto a la instalación de cadenas.
Y otro punto importante. Con cadenas de nieve se aconseja no circular a más de 50 km/h (con cadenas metálicas, a 30 km/h). Y siempre debemos retirarlas cuando ya no sea obligatorio o no se requieran, ya que podemos dañar los neumáticos.
Practica antes de tener que usar las cadenas para comprobar que se ajustan bien al tamaño de los neumáticos.
Para colocar las cadenas, lo primero es retirarse a un lugar seguro y apartado de la carretera para colocarlas ya que no sabemos cuánto tiempo nos va a llevar; señalizar la posición del vehículo y ponerse el chaleco reflectante.
Es muy importante colocar las cadenas adecuadamente. Por ello se recomienda consultar las recomendaciones del fabricante para no saltarse ningún punto importante. Antes de tener que usarlas, conviene practicar y comprobar que se ajustan perfectamente al tamaño de nuestros neumáticos.
Siempre, siempre, colocar las cadenas con guantes. Podemos hacernos cortes, perder habilidad en las manos a causa del frío, etc. Para evitarlo es muy importante ponerse guantes.
Y por último, comprobaremos que las cadenas están bien puestas. Si se ha optado por cadenas de tensión manual, circularemos 100 metros para posteriormente volver a ajustar las cadenas. Hay que revisar con frecuencia que las cadenas estén bien montadas y sujetas, que no se haya soltado ningún enganche.
Sol de León
Comunicación & Social Media