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01 DE AGOSTO |

¿Cómo elegir barras de techo para el coche?

Llegan las tan merecidas vacaciones estivales y, con ellas, la necesidad de un espacio extra en el coche para el equipaje.

En muchos casos, la capacidad de los maleteros se queda corta para las maletas de toda la familia, sobre todo si además queremos llevar bicicletas, cayacs y otros elementos voluminosos. Para estas situaciones están especialmente diseñadas las barras de techo.

Tanto si necesitamos instalar un cofre, un portabicicletas o casi todos los portaesquís, las barras de techo son imprescindibles. Existen otras opciones como el remolque o el cofre trasero, que también ampliarán el espacio de carga, aunque tienen el inconveniente de aumentar la longitud total del coche y, en el caso del remolque, se complica la conducción.

De hecho, las bacas portaequipajes o barras de techo son la solución más popular entre los conductores, pero hay que considerar una serie de recomendaciones según el uso que queramos dar a este práctico accesorio y, sobre todo, para no comprometer la seguridad vial.

¿Cómo elegir barras de techo para el coche? | ÓN

La primera cuestión que se debe tener en cuenta es el tipo de barras a elegir por su material de fabricación. Existen barras fabricadas en acero y en aluminio. Las de acero son más económicas y resistentes, pero también más pesadas, más rígidas y también más sensibles a la corrosión. Pueden ser la opción adecuada si se van a utilizar de manera ocasional y para transportar objetos algo más pesados, siempre dentro de los límites establecidos por el fabricante y por la normativa vigente. Por su parte, las barras de aluminio son bastante más ligeras y redondeadas, favoreciendo la aerodinámica en ruta. Además, su resistencia es similar a las de acero.

Otro factor determinante a la hora de escoger el tipo de barras de techo lo encontraremos en el propio vehículo que, según su diseño, va a condicionar la elección. Existen actualmente seis tipos de techo por su sistema de fijación: con railing, con railing integrado, con perfil en T, con puntos de fijación, con vierteaguas y, por último, el techo normal, que no dispone de ningún tipo de ranura ni puntos de anclaje. Afortunadamente, a la hora de comprar las barras es fácil encontrar opciones universales que servirán prácticamente para todo tipo de coches, así como kits de fijación. Eso sí, cuanto más preparado esté el vehículo para estos elementos, más sencilla será la instalación. Por eso, será mucho más rápido montar unas barras en un techo con puntos de fijación que en uno que no los tenga.

Tras instalar las barras, es importante asegurarse de que el montaje haya quedado correctamente fijado para no comprometer la seguridad vial.

Una vez adquiridas las barras más idóneas para cada caso, solo resta instalarlas siguiendo las instrucciones del fabricante y asegurándonos de que el montaje ha quedado correctamente fijado. Si las barras están homologadas y se han puesto bien, no hay obligación de retirarlas para pasar la ITV.

También es más que recomendable realizar inspecciones periódicas para comprobar que las fijaciones permanecen bien apretadas y sin holguras. Después, hay que acomodar la carga de manera segura. El cofre de techo es recomendable para transportar maletas, bolsas o mochilas que, de otra manera,  podrían estar sueltas en el habitáculo con el consiguiente riesgo en caso de frenazo o accidente. Tanto el cofre como los portabicicletas o portaesquís, excepto los de imán y algunos otros modelos, disponen de sistemas que quedan perfectamente anclados a las barras de techo.

En los casos en que debamos asegurar bultos directamente a las barras, estos tienen que ir muy bien atados y con el peso bien distribuido para garantizar una buena estabilidad del vehículo. Durante el viaje, es aconsejable parar de vez en cuando para comprobar que nada se ha movido de su sitio.

© Imágenes: Shutterstock.

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