Hace más de dos décadas desde que surgiera la primera generación 1G. En los años 90, la multinacional sueca Ericson fue la responsable de desarrollar sistemas de telefonía móvil, como AMPS y TACS, que dieron paso al resto de generaciones de comunicación de banda ancha móvil. Le sucedieron la tecnología 2G, 3G hasta llegar a la que utilizamos actualmente, el 4G.
Ahora, un nuevo hito marcará nuestras vidas a la hora de comunicarnos. A finales del año 2019 y principios del 2020, llegará la nueva tecnología 5G. Una nueva generación de comunicaciones que nos traerá, según los expertos, la llegada de una nueva era tecnológica. El principal avance, de la sucesora del actual 4G, será su espectacular rendimiento con velocidades (teóricas) de transferencia de datos de bajada de 10 Gbps. No obstante, este salto tecnológico nos ofrecerá múltiples ventajas:
Un 5G considerablemente más veloz de lo que conocemos hasta ahora. Esta tecnología será mucho más rápida. Los expertos aseguran que su tiempo de espera o retardo, más conocido como latencia, será menor, una décima parte. Su velocidad de Internet será de hasta 100 veces mayor de los que actualmente ofrece el 4G. Una tecnología que dará cabida a nuevo mundo de aplicaciones, y que permitirá, por ejemplo, poder hacer descargas de películas en apenas tres segundos.
¡La llegada de los super smartphones! Los teléfonos móviles que incorporen la tecnología 5G harán que batería no se acabe en esos momentos tan inoportunos, ni que se reinicien por el calor ambiental o por la sobrecarga. Estos móviles serán las nuevas extensiones de los ordenadores más potentes del mercado.
Capacidad… ¿ilimitada? o casi. Este gran avance tecnológico es sinónimo de grandes avances en cuanto a la capacidad. Por esta razón, las operadoras telefónicas deben tener en cuenta este punto y plantearse si el acceso a Internet tendrá que ser más barato o ilimitado.
¿El 5G solo ya no se limita a un dispositivo? La respuesta es no. Este nuevo sucesor va más allá del mundo de los smartphones. Artefactos industriales, vehículos de conducción y todo tipo de máquinas, estarán conectadas entre sí gracias a esta nueva tecnología.
Sin embargo, toda moneda tiene su doble cara. Ya existen detractores de esta nueva banda ancha móvil. Una de las principales razones, es que la tecnología 5G solo funciona en las grandes ciudades conectadas y, por ende, no están al alcance de todos. El segundo motivo, es porque esta revolución provocará que un gran impacto del entorno. Es decir, si ya las grandes urbes lucen una estética industrial, con el 5G lo harán mucho más. Última razón, y no menos importante, ¿con el 5G necesitaremos más de un dispositivo móvil? Éstas y otras preguntas tan solo conseguirán resolverse tras su llegada.
El 5G es un hecho. La tecnología avanza a pasos agigantados para conectar a las personas con las cosas y viceversa. Mientras, esperamos a la nueva era tecnológica de la comunicación, disponemos de los “Smart Stadium” para que los aficionados puedan sentir lo mismo que sus ídolos y de dispositivos que utilizan tecnología háptica para sentir las cosas sin tocarlas.