Trump o Biden: ¿qué podemos esperar en los mercados?
- 05 octubre, 2020
La tensión preelectoral sigue al alza en Estados Unidos y, en consecuencia, en los mercados financieros, que cotizan una elevada incertidumbre por esta vía. Las encuestas, de momento, se decantan por el candidato demócrata, Joe Biden, frente al republicano Donald Trump, pero, por supuesto, no está nada decidido. Las propuestas de ambos, sobre temas tan importantes como los impuestos, las renovables o el sector tecnológico tendrán un diferente impacto sobre el mercado. Lo analizamos:
Si gana Trump, en principio tendremos más de lo mismo, aunque como los presidentes suelen elegir su segundo mandato para aprobar medidas menos populares al no temer ya unas nuevas elecciones, es difícil saber qué esperar.
Biden también ha prometido revertir la mitad de la bajada del impuesto de sociedades que aprobó Trump, lo que supondría subirlo al 28%.
Por el contrario, en caso de que gane Biden con las dos cámaras demócratas (ola azul), podría impulsar todas las medidas que ha propuesto y que son relevantes para los inversores.
A nivel doméstico, un gobierno demócrata probablemente eleve el salario mínimo y mejore la protección de los “falsos autónomos”, como los conductores de Uber o los ciclistas de las empresas de reparto.
Biden también ha prometido revertir la mitad de la bajada del impuesto de sociedades que aprobó Trump, lo que supondría subirlo al 28%. Pero también elevar las cotizaciones a la Seguridad Social para salarios superiores a los 400.000 dólares. Igualmente ha propuesto elevar el tipo máximo del impuesto de la renta al 39,6% (Trump lo bajó al 37%).
El efecto de ambas medidas sería teóricamente negativo para el S&P 500, con un impacto estimado en los márgenes de beneficios de las compañías en 2021 del 9%. Pero como, al mismo tiempo, Biden está proponiendo un super plan de inversión en renovables. Si el gasto (entre 1,7 y 5 billones de dólares) sobrepasa el incremento de los impuestos, el efecto “teórico” sobre el mundo corporativo podría ser, a corto plazo, bastante neutral.
Las empresas que se dedican a energías verdes se beneficiarían del Green New Deal de Biden, puesto que pretende que EE.UU. tenga emisiones cero en 2050 y realice una inversión histórica en energía limpia, investigación e innovación climática e incentive el uso rápido de innovaciones de energía limpia en toda la economía, especialmente en las comunidades más afectadas por el cambio climático. Por el contrario, las empresas más contaminantes saldrían, a priori, perdiendo.
Ambos partidos están de acuerdo en hacer frente a China y en frenar su crecimiento desleal. Pero la aproximación de los demócratas sería probablemente distinta, buscando negociar con otros países para hacer un frente común. Están buscando reconstruir las relaciones de Estados Unidos con sus aliados y reforzar alianzas como la OTAN, la Organización Mundial del Comercio y los tratados del clima.
Por su parte, el sector que, potencialmente, más impactado saldría sería el tecnológico, ya que los demócratas han verbalizado claramente su intención de incrementar la regulación de los gigantes del sector, barajando incluso su ruptura forzosa en varias empresas.
Un cambio hacia el partido demócrata a priori parece que sería mal recibido por la bolsa. Pero dado que las probabilidades de una victoria completa de demócratas no son tan elevadas y que las subidas de impuestos se compensarían con importantísimos planes de inversión, el escenario no es necesariamente negativo.
Por último, dada la cercanía de ambos candidatos en las encuestas, que el voto por correo en esta ocasión va a ser muy elevado y a que en algunos estados se permite que dicho voto llegue con posterioridad a la cita electoral, es posible que tardemos días en saber quién será el nuevo presidente de Estados Unidos. Un aspecto muy importante a tener en cuenta ya que a los mercados financieros no les gusta la incertidumbre.